En la última ecografía que nos hicimos, el médico nos dijo cuál era la posición del bebé.
“Se encuentra sentado, mírale que a gusto que está, parece que está en un spa”.
En las madres primerizas esto suele ocurrir hacía la semana 34-38, Es decir que hasta los 7 u 8 meses el bebé puede cambiar de posición, pero una vez llegado a esta fecha es raro que ya cambien, normalmente esa es la postura que tendrán durante el parto, sea cual sea. En el caso de las mamás veteranas, como es mi caso, puede que esto no suceda incluso hasta la misma semana 40. Y yo que soy previsora hasta decir basta, con el embarazo no iba a ser menos y espero que ya para la semana 34 esté colocadito.
Pero como esto es algo que no se puede predecir, yo ya me he estado informando sobre qué alternativas hay para que el bebé se dé la vuelta en caso de no producirse de manera espontánea.
Existe una gran variedad de técnicas, posturas y ejercicios que podemos realizar durante el embarazo para que nuestro bebé adquiera la postura correcta para nacer y así evitar una cesárea programada.
Practica la natación; la natación en general es muy buena durante todo el embarazo ya que ayuda a tonificar todos los músculos, y mejora el sistema cardiorespiratorio, en general, y en particular, el nadar, sobre todo si nos ayudamos de una tabla, permite que el útero descanse libremente y el bebé tenga mucho espacio y poca resistencia con la gravedad para girarse.
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Haz Yoga prenatal, el Yoga ya de por sí, tiene múltiples beneficios, lo podéis ver el post que publicamos hace dos meses. Pero para el tema que nos ocupa hay determinadas posturas que favorecen que nuestro bebé pueda darse la vuelta de manera natural, de entre todos los estiramientos el más indicado es el estiramiento del gato. Consiste en lo siguiente; en posición de cuatro patas, relaje su cabeza hacia el pecho y encorve la espalda y vuelva a ponerla recta, sincronice con la respiración. De este modo dejamos igualmente con más libertad al útero.
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Utiliza la Pelota de Pilates o dilatación, el estar sentada en una pelota de dilatación ayuda a que la pelvis esté más amplia para que el bebé pueda girarse. Existen muchos ejercicios que puedes hacer con ella, desde sentarse y hacer círculos, hasta abrazarla y mantener esa postura unos minutos.
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La postura del mahometano, esta postura consiste en ponerse a cuatro patas, desplazando el tronco hacia atrás y pegando el pecho al suelo al mismo tiempo que se mantienen los brazos extendidos hacia adelante. Si estás incómoda por la barriga prueba a separar un poquito las piernas y así dejarle hueco. En esta postura se puede estar como unos 10 o 15 min al día.
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Técnica de Moxibustión, esto es algo totalmente desconocido para mí, tanto que incluso al principio me sonaba a chino, y no iba mal desencaminada. ¿Qué es la Moxibustión? Es una técnica que se utiliza en la medicina tradicional china con unos resultados muy exitosos.
Consiste en aplicar calor a través de la combustión de una planta llamada Artemisa, este calor se coloca en determinados puntos de acupuntura que estimulan la producción de hormonas maternas que favorece que el revestimiento uterino se contraiga, lo que estimula la actividad fetal. Esta técnica se sigue realizando posteriormente en casa después de explicarla bien a los padres, se realizará durante 15 minutos y se puede repetir dos veces al día. Es recomendable a partir de la semana 32 hasta la 35.
Y si todo esto no funciona, existe también otra técnica que se practica ya en el hospital y con un servicio médico especializado, se trata de la Versión cefálica externa.
Esta técnica se realiza alrededor de la semana 37 de gestación, consiste en girar el feto dentro del útero mediante una serie de maniobras que el ginecólogo realiza con las manos sobre la piel de la tripa de la embarazada. Es una técnica con un gran control, ya que antes de empezar la maniobra se realiza una ecografía para conocer la posición del feto, su tamaño y la cantidad de líquido amniótico, además se monitoriza al bebé para controlar que todo está bien. Normalmente con este tipo de técnicas no suelen surgir ningún tipo de complicación, pero si así fuera, se realizaría una cesárea de urgencia.
En definitiva, hay muchas alternativas a una cesárea programada por el hecho de que el bebé venga en posición podálica, nosotros desde luego esperaremos a ver la próxima ecografía y veremos como está colocado, de momento practicaremos el resto de técnicas que no requieren especialista, así que nadaremos, seguiremos con el yoga y nos llevaremos bien con la pelota de pilates.
Ya os iré contando.
Consiste en aplicar calor a través de la combustión de una planta llamada Artemisa, este calor se coloca en determinados puntos de acupuntura que estimulan la producción de hormonas maternas que favorece que el revestimiento uterino se contraiga, lo que estimula la actividad fetal. Esta técnica se sigue realizando posteriormente en casa después de explicarla bien a los padres, se realizará durante 15 minutos y se puede repetir dos veces al día. Es recomendable a partir de la semana 32 hasta la 35.
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Y si todo esto no funciona, existe también otra técnica que se practica ya en el hospital y con un servicio médico especializado, se trata de la Versión cefálica externa.
Esta técnica se realiza alrededor de la semana 37 de gestación, consiste en girar el feto dentro del útero mediante una serie de maniobras que el ginecólogo realiza con las manos sobre la piel de la tripa de la embarazada. Es una técnica con un gran control, ya que antes de empezar la maniobra se realiza una ecografía para conocer la posición del feto, su tamaño y la cantidad de líquido amniótico, además se monitoriza al bebé para controlar que todo está bien. Normalmente con este tipo de técnicas no suelen surgir ningún tipo de complicación, pero si así fuera, se realizaría una cesárea de urgencia.
En definitiva, hay muchas alternativas a una cesárea programada por el hecho de que el bebé venga en posición podálica, nosotros desde luego esperaremos a ver la próxima ecografía y veremos como está colocado, de momento practicaremos el resto de técnicas que no requieren especialista, así que nadaremos, seguiremos con el yoga y nos llevaremos bien con la pelota de pilates.
Ya os iré contando.
Seguro que se dará la vuelta antes de nacer, todas esas técnicas parecen geniales pero hay una que también puedes intentar y es hablar mucho con tu bebé, si ya tiene nombre...háblale con calma llamándolo por su nombre y explicándole todo, que debe darse la vuelta y todo aquello que te preocupe. Elige un momento de tranquilidad donde estés a solas con él y estés relajada. Hazlo como rutina hasta que se de la vuelta y luego sigue conectando con él hasta el momento del parto.
ResponderEliminarSé que algunas personas pensarían que estoy loca, pero la conexión con el bebé favorece muchísimo hasta su nacimiento y facilita las cosas en la mayoría de los casos. Suerte guapa ;-)
Es algo que hago muchisimo, le digo Alex date la vuelta ahora que hay espacio, que luego no vas a poder...por suerte ya se ha dado la vuelta y está colocadito. Muchas gracias por la recomendación.
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